martes, 21 de octubre de 2014

EL BESO QUE MARCÓ LA HISTORIA







Todos conocemos la foto que tomó entonces Alfred Eisenstaedt en la que capturó a un joven marinero de 18 años besando a una enfermera en Times Square (Nueva York), esta foto se publicó en la revista en la cual Eisenstaedt trabajaba, la revista LIFE.




El día 14 de Agosto de 1945 sucedió en Nueva York el acontecimiento más esperado desde hacía tiempo, se comunicó que la 2º Guerra Mundial había terminado. Tan grande fue la emoción que todo el mundo salió a la calle a celebrarlo, un chico lo celebró besando a todas las chicas que se dejaban.
La foto se convirtió en un icono para todos los Newyorkinos de aquel día, esto se confirma dado que 69 años más tarde se sigue rememorando el fin de la 2º Guerra Mundial con el beso de miles de parejas en Times Square imitando a la desconocida pareja.


Tanto ha llegado a influir esta fotografía que un brasileño llamado Eduardo Kobra se empezó a conocer pintando varios murales en su ciudad natal, Saô Paolo. Su representación de la foto recuerda a la vista de un caleidoscopio pero también hizo propuestas muy realistas en grandes ciudades y  que en muchas ocasiones contrasta la gran cantidad de color con el carácter serio de las fachadas. http://eduardokobra.com/



Surgieron varias dudas sobre la captura: algunas personas decían que era un montaje, otras apoyaban la idea de los dos desconocidos se besan y por un casual al fotógrafo se le ocurre disparar la cámara y otros aseguran que era una pareja. Todo eso es una incógnita ya que no se puede asegurar nada, lo único que sabemos es que el marinero se llamaba Glenn Edward Mc Duffin y la enfermera Edith Shain.

jueves, 9 de octubre de 2014

VIAJE A LA LUNA

Todo empezó con el nacimiento del parisino George Mélies en 1861.



Por influencia de su padre estudia mecánica, ahí se da cuenta de que su pasión era el espectáculo y se integró en un grupo de magos y artistas. Más tarde, en París descubrió un nuevo artilugio, llamado Cinematógrafo.



 Los hermanos Lumiere aportaron al parisino lo que hoy consideramos sus características ya que fueron los creadores del famoso artilugio, el cual no mostraron al público hasta haber conseguido grabar centenares de films y ver que funcionaba.


A Mélies le interesó tanto que lo quiso comprar pero los hermanos Lumiere no se lo quisieron vender por la competencia.


A pesar de esto, consiguió comprar un proyector y una cámara y comenzó a grabar numerosas películas. Su gran éxito empezó añadiendo en las proyecciones su sensibilidad, su gran capacidad creativa y su espíritu empresarial, también introdujo trucos de magia muy elaborados. A parte se puede decir que fue el primero en llevar el color a sus trabajos pintando cada diapositiva fotográfica.


Como consecuencia a lo anterior doto al cine de técnica, arte y fantasía.



En 1914 pasó por un mal momento, con la llegada de la Primera Guerra Mundial Mélies se arruinó y decidió quemar todas sus películas, aunque tuvo la suerte de haber vendido fuera del país algunos de los film que más éxito tuvo, como por ejemplo Viaje a la luna(1902) en el que se ven muchas de     sus características tales como su trabajo en los aparatos mecánicos que aparecían en las proyecciones, el cuidado con el decorado y el vestuario.



Cabe destacar algún film mas como El inquilino diabólico, El libro mágico o El reino de las hadas.



Su trayectoria e influencia en futuros cineastas ha sido tan reconocida  a lo largo de la historia del cine que se le hizo un guiño con la película La invención de Hugo en 2011 al gran George Mélies.


La foto de la izquierda es del film El reino de las hadas de George Melies y la de la derecha pertenece a una parte de la película La invención de Hugo